Hoy os voy a hablar de unas lentillas bastante desconocidas en el mundo de la óptica, pero que poco a poco cada vez se van viendo más. Os voy a explicar en este post como son esas lentillas, sus pros y sus contras, su manejo y en que casos las adaptamos.
Estas lentillas son mas grandes que unas lentes de contacto normales (blandas o semirígidas), miden desde 15 a 16mm de diámetro, son tan grandes para su principal función, que es hacer un reserva de lágrima en su interior y que la cornea este hidratada en todo momento. Como su nombre indica apoyan en la esclera (zona blanca del ojo).
Normalmente las recomendaremos en pacientes con corneas que no queremos tocar: como puede ser un síndrome de Sjögren (ojo seco), queratoconos (cornea irregular), lesiones o úlceras (a modo terapéutico).
Como contras diré que su precio y mantenimiento es más elevado que el habitual en otras lentes de contacto, tenemos que tener una mayor higiene del ojo y palpebral (bacterias y gérmenes) y también a la hora de manipularlas, y cuesta mucho su inserción y extracción (con ventosa).
El óptico optometrista hará una adaptación de esta lentilla, con una serie de pruebas; topografía o mapa corneal, fluorograma para ver el estado del ojo (teñido del ojo). Pondremos la lentilla rellena de solución salina y fluoresceina y se hará una evaluación con una sección óptica del ojo, y posteriormente una evaluación de la conjuntiva y esclera. A los 30-45 minutos volveremos a evaluar la lentilla en diferentes cuadrantes y haremos una sección óptica con luz difusa (para ver que la cantidad de lágrima sea la adecuada). Normalmente hago fotos para comparar en futuras revisiones.
El usuario debe de saber muy bien ponerse y quitarse estas lentillas (hay muchos abandonos a consecuencia de que no se manipulan bien), por eso tendrá que venir varias veces a consulta y enseñarle, recomendaremos que vea vídeos, y sobretodo mucha paciencia.
Las revisiones de estas lentillas son muy importantes, y son a los 45 min, a las 3 horas, a las 5 horas, a los 3 días, a los 15 días, al mes, a los 3 meses, a los 6 meses y al año.
El paciente nos deberá firmar un consentimiento informado que nos exime de cualquier mal uso causado por su parte.
Su duración es de un año, no recomendamos alargarlas más de ése tiempo bajo ningún concepto.
Consulta a tu óptico optometrista si eres candidato o no para usar estas lentillas. Espero haberte ayudado.
Bueno qué bien escribes… te mando un abrazo fuerte desde Medellín (Colombia)
Muchas gracias Antonio, la verdad es que tus palabras me motivan para seguir escribiendo dia a dia y compartir mis experiencias con todos vosotros.
Un fuerte abrazo desde Madrid.